Capítulo 10

Dánae 


Oscuridad... oscuridad.... era lo único que veía, y no me importaba, estaba en un estado de total paz interior, yo flotaba en la oscuridad, parecía que me movía con gracia... y de repente.... ¡¡PLAF!!

Mis ojos se abrieron rápidamente y vi la cara de Meg enfrente de mi, instintivamente me toqué una de mis mejillas... me dolía y la tenía roja. Pronto supe que métodos tenía Meg para despertar a alguien inconsciente.

 -Estás loca- le dije
 -Puede- me respondió
 -¿Y el cuervo? El chico- Le pregunté

De repente vi como Meg se ponía nerviosa y un poco roja

 -¿Pasa algo Meg?- le pregunté incorporándome, pues estaba tumbada.
 -No, nada-dijo tartamudeando- Es solo que en cuando me desperté el se marchó y cuando os vi así... pensé que estabais muerta y cada vez que lo recuerdo, me pongo nerviosa
 -Ah- dije un poco más tranquila- Guay entonces ¿Y las demás?
 -A Kayrah y a Narelle ahora las despierto, después nos marchamos a buscar a Kalea y a Náyade a donde estén
 -No, no, mejor las despierto yo-dije temerosa de lo que las pudiese hacer

Me acerqué a Narelle, la cual me sería útil para despertar a Kayrah y la moví lentamente de un lado hacia otros, le di pequeños golpecitos en un hombre y poco a poco se despertó, le expliqué todo lo ocurrido y pronto me ayudó a despertar a Kayrah, una cantidad de agua que podría caber en un cubo se abalanzó contra ella y en cuestión de segundos se encontraba de pie, con los ojos muy abiertos y mirando con cara asesina a Narelle. Pronto buscó por todas partes con la mirada a Kalea supongo, su mejor amigas, pero al no encontrarla me miró y me preguntó:

 -¿Dónde está Kalea? ¿Y Náyade?- dijo mirando más detenidamente
 -A eso vamos, a encontrarlas-le respondió Narelle
 -¿A dónde?- preguntó Kayrah haciendo la pregunta más normal y con más cordura de todo el día.
 -¿Por donde le visteis aparecer?-preguntó Meg
 -¿A quien?-preguntamos Kayrah y yo
 -A Xie-nos respondió Meg
 -¿Xie? Se llama... ¿Xie?-pregunté extrañada

De nuevo vi como Meg se ponía nerviosa

 -Si, Xie, se lo oí decir a Narelle antes de quedar inconsciente, así que ahora, ese es su nombre oficial- me dijo
 -Ah, claro- volví a responder.

Claramente no soy tonta, y sabía que en ese momento Meg no me lo había contado todo.

 -Bueno, lo vimos aparecer por aquella dirección- dije señalando una pequeña abertura en medio de la arboleda
 -Bien... ¡en marcha!-gritó Meg, y todas nos pusimos a correr detrás de ella, excepto Kayrah, que iba por los árboles, para variar.

 Había pasado cuarto de hora y de nuestras amigas... ni rastro. Me estaba empezando a preocupar cuando Kayrah, que era la que más alto se encontraba nos gritó a modo de que había visto algo mientras señalaba a su derecha y empezaba a ir en esa dirección, nosotras le seguimos y acabamos en un pequeño claro donde, tanto Kalea como Náyade se encontraba atrapada entre ramas y estaban siendo absorbida por la arena y amabas tenían la boca tapada por las ramas.

 -¡Hay que sacarlas de ahí!-grité histérica, soy muy dada a ponerme histérica-¡Kayrah! Esas ramas son plantas... ¡haz algo!
 -Vale-dijo tartamuedeando, se notaba que la había asustado.

 Tras hacer el proceso de contactar con el alma de las plantas, Kayrah nos había dicho que era imposible, estaban contaminadas de oscuridad y ella no podía hacer nada. Necesitaba que las plantas se purificasen para poder intervenir. Todas fijaromos nuestra mirada en Meg pensando que ella podría absorver la oscuridad. Meg captó la indirecta de las miraditas y no se como ni porque, de repente de las plantas salió un líquido negro que llegó hasta Meg, subió por su delicado cuerpo hasta llegar a las palmas de las manos en la cuales se abrió una agujero por donde entró el liquido negro.
Miré con espanto como el liquido negro se introducía en el cuerpo de mi amiga, pero al ver que ella no se alteraba yo tampoco lo hice.
Kayrah esta vez si pudo liberar de las ramas a nuestras amigas, aunque la arena se las tragaba lentamente, ahora que ya podían hablar, tocaba interrogarlas

 -¿Qué a pasado?- les pregunté
 -Nada, que Náyade metió la pata hasta el fondo- dijo un tanto enfadada Kalea
 -¡Mentira! Es solo que...-Náyade paró a pensar- Es cierto, metí la pata...
 -¿Que pasó?-insistí
 -A ver- empezó Kalea- El tipejo ese de negro no tardó en tumbarnos y nos dejó presas en una masa negra e inconscientes. Cuando despertamos no nos podíamos mover, pero como teníamos las manos al descubierto de la masa a Náyade se le ocurrió una idea... una idea penosa
 -¡Oye!-saltó Náyade

Kalea la ignoró y continuó:

 -Su idea era agarrarnos con las manos a unas ramas que teníamos encima de la cabeza mientras unas arenas moverdizas que ella había creado anteriormente absorbía la masa negra, a mi no me gustó la idea desde el principio, pero ella no me hizo caso y nada, se lanzó a la ''aventura'' al principio su plan funcionó, la masa negra fue absorvida, pero se le olvidó, que las plantas se alimentan de la tierra, así que, como la tierra estaba infestada de la masa negra, al instante se volvieron  malvadas y no nos soltaron y poco a poco nos ibamos sumergiendo en estas arenas y como no hagáis algo ya... ¡¡nos vamos a undir!!


Entre todas las sacamos de ahí y nos marchamos de esa montaña infernal, nada más llegar al edificio de las chicas nuestros maestros saltaron a por nosotras, Adlery abrazó muchísimo a Kayrah, Mime se acercó a Náyade y comprobó que estaba bien, Sephora se acercó a Meg y le lanzó una mirada amistosa (así era Sephora) Archer se acercó a Narelle, ella hizo con el dedo un ''ok'' y el asintió con la cabeza, Soef  levantó la mano a Kalea y ella sonrió y Diàn se acercó a mi y me abrazó fuertemente. El me considera su mejor amiga, su hermana pequeña... a mi me gustaría que me considerara de otra forma, algo un tanto... superior. disfruté del abrazo todo lo que pude, porque la noticia que siguió a aquel momento fue demoledora... ya sabían lo ocurrido, y por lo tanto, que ese sitio ya no era seguro, que incluso Koete sería más seguro, al ser más grande y tener donde esconderse... resumiendo... mañana nos ibamos a Koete