Capitulo 1

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En una sala una redonda, de paredes blancas y suelo de marfil se encontraban  seis figuritas. Cada una tenía el tamaño de un mano y eran de distintos colores. Se elevaban majestruosas en un altar en medio de la estancia, también blanco. A  los pies del altar una chica de cabellera azul y vestido blanco parecía estar rezando. Cuando terminó la oración se asomo por la única ventana de la estancia y contemplo la luna de ese planeta. La luna estaba rodeada de preciosas estrellas de colores cantosos como el amarillo, el azul celeste, el rojo, el verde y el rosa. La chica suspiró, la luna era lo único que les quedaba ahí, en Koete, lo único que emitía una luz pura y verdadera, pues el sol ya no era amarillo, era negro y aunque emitía luz, sus rayos quemaban más que antes. Esa era una de las pocas consecuencias que había provocado la invasión de la oscuridad 

La puerta de la sala se abrió y la chica se giró rápidamente, pero al ver quien era se tranquilizó

 -Hola Tey-saludó la chica

Tey parecía tener la edad de la chica, era alto, rubio y de ojos azules, como los de la chica

 -Hola Marta-le respondió Tey

Marta se paró a pensar que podía hacer el ahí, pero pronto lo adivinó

 -Ha llegado ya la hora... ¿no es así?

 -En efecto, y te han encomendado a ti la misión...-le respondió Tey

 -¿A mi? Entonces... ¿tengo que llevarlas yo a Estion?-preguntó Marta

 -Así es

 -No se si podré

 -Claro que puede-dijo Tey haciendo un movimiento de mano y a continuación susurró unas palabras y ante ellos apareció una portal a otro mundo- Crúzalo, te llevará a tierra 

 -¿Cómo las voy a encontrar?-preguntó Marta

 -El portal hará esa parte

Marta se lo pensó dos veces, pero ella había sido elegida para  trasladar a las elegidas a Estion... las elegidas... las únicas que podían salvar su mundo de la oscuridad. Marta cruzó el portal y una brisa le envolvió, cuando volvió a pisar tierra observó para su asombro que se encontraba en una playa y en ella una chica de su mismo color de cabello observaba nostálgica el mar






Narelle se encontraba en una de las múltiples playas de Australia mirando a el mar, oh, soñaba con nadar libre en el.... pero ni ella era libre, ya que vive en un internado porque sus padres murieron por alguna razón. Maldito internado... lo odiaba, nunca había tenido libertad dentro de el y... ahora que ya tenía una edad considerable (15 años) tenía que hacer muchas tareas que la dejaban con escasos momentos solo para ella.... cogió una piedra se levantó, pues estaba sentada, y la tiro haciendo que rebotara.


Narelle empezó a pasear por la playa siempre con la mirada en el mar. El viento acarició su cara e hizo que sus ojos se vieran mejor, pues levantó su pelo azul. Los pelos de Narelle tenían un tono rojizo, parecido a un rubí. Narelle paró de repente y miró al lugar a donde había llegado; la entrada de una cueva, sin pensarlo dos veces entró hasta llegar a una pequeña sala de la cueva con arena y una playita de poco más de 5 metros, aun así era la más bonita que Narelle había visto




Marta, que la había seguido en todo el momento se encontraba a una prudente distancia para escuchar todo pero que no la vieran


  -Ojalá-oyó decir Marta a alguien-ojalá hubiera algún lugar donde sentirme libre... donde ser yo misma


Marta pronto adivinó que esa persona era Narelle.... era su oportunidad.


Marta sacó una pequeña canica de un bolsillo y en ella dibujo una gota con su dedo, rápidamente se la tiró a Narelle, la cual se vio envuelta en una luz azul, pero cuando intentó escapar, ya era demasiado tarde... ahora se encontraba en otro sitio... otro mundo






La cueva se quedó vacia, pues Marta también había desaparecido y ahora se encontraba en una lugar lleno de plantas ''Que bonito'' pensó Marta. De repente vio que una chica saltaba de árbol en árbol y salía de aquel extraño lugar, que Marta no conocía, pero no era otra cosa que la selva amazónica.  Marta siguió a la chica porque ella sabía que esa era una de la elegidas.


La chica saltó de uno de los árboles a una terraza de una casa


 -Hola papá- saludo la chica a un hombre que se encontraba con un ordenador
 -Hola Kayrah- le dijo el hombre a su hija- ¿Sabes que estoy investigando?
 -Sorprendeme-dijo Kayrah a su padre. El padre de Kayrah era un biólogo que investigaba la selva amazónica
 -Estoy investigando el comportamiento de la capinurí-respondió el biólogo


Kayrah se dio la vuelta para entrar en la casa. La chica tenía el pelo verde y unos ojos de un color como Kiwi, y aunque tiene una cara muy risueña que parece de una niña de 12 años, Kayrah tiene 16


Kayrah desapareció dentro de la casa mientras su padre seguía tecleando, de repente este vio a Marta y la chica observó que la habían descubierto, pero el señor hizo un gesto de que se acercara  y Marta obedeció


El biólogo no se sorprendió al ver las vestimentas de las chica ni nada por el estilo


-¿Ha llegado la hora?
-¿Cómo lo  sabe?-contraatacó Marta
-Oh, porque yo era de Koete, escapé y intenté encontrar una de las elegidas para cuidarla... los padres de Kayrah murieron cuando tenía un misero año. Pero yo la adopté cuando me di cuenta de que era especial
-¿Koete?¿Yo especial?¿Quién es ella?-preguntó una voz desde la puerta
-¡Kayrah!Madre mía que lío-dijo el biólogo
-No, que va, siéntate niña, que te lo voy a explicar todo-le dijo Marta, poco después, Kayrah estaba sentada con su padre- Yo me llamo Marta, la guardiana de uno de los templos que hay en Koete, un templo dedicado a las seis elegidas. Koete es un mundo diferente al tuyo, lleno de magia y dividido en 4 reinos, uno de ellos, el más grande, se llama Figyu y en el reina la princesa Sandra, los siguientes son Cuyi, Zafis y Iopo, ahí no reinan princesas, como en Figyu, vive gente, en Cuyi, viven los magos, en Zafis las hadas, unicornios, elfos y ninfas y en Iopo, un país entre las montañas, habitan gigantes, trolls y dragones. Es un mundo precioso Koete, pero no hace mucho.... un mago que pensaba que la magia blanca no era la correcta, si no la negra, abrió un portal dejando que la oscuridad, encerrada en el vacio de por vida, volviera a Koete y ahora lo inunda todo... y no nos deja vivir. Pero tenemos una esperanza, cinco chicas que viven en la tierra, pero que en realidad nacieron en Koete, porque el espiritu de los elementos llegó desde Koete hasta las elegidas, y ahora, que han pasado 16 años desde que vivimos bajo la oscuridad... las elegidas tienen que salvarnos y tu eres una de esas elegidas, por eso, debo transportarte a otro lugar donde aprenderás a luchar contra la oscuridad y dominar tu elemento.... las plantas-y Marta calló


Kayrah se encerró en su cuarto e intentó asmilarlo todo ''Es decir... que es mi mundo ese tal Koete... pues entonces tendré que salvarlo ¿no? porque si la selva empezara a arder yo la protegería con todo lo que tengo...''
 -Decidido, me voy para salvar Koete, aunque dicho así, quede un poco raro-anunció Kayrha, los otros no pudieron evitar una sonrisa


Marta sacó otra canica, dibujó una flor, se la tiró a Kayrah y esta se vio envuelta por una luz verde, se despidió de su padre y no pudo evitar ver, que, aunque el biólogo sonreía... lloraba y ella hizo lo mismo


Marta también desapareció y esta vez vio que estaba a la puerta de un colegio, subió a uno de los árboles y se escondió, esperando ver a la siguiente chica















Bueno, esto es todo por ahora, se que quedan 4, pero me pasé de largo con la introducción y... ¡¡necesitaba que leyeseis una parte ya!!